lunes, 17 de noviembre de 2008

¿Qué es una concepción del mundo?. Manuel Sacristán.

Concepción del mundo:

Manuel Sacristán comienza tratando de dar una definición al concepto de visión del mundo. Nos dice que no es un saber ni un conocimiento sino una serie de principios que dan razón de la conducta de un sujeto, a veces, sin que este se los formule de un modo explícito. Habla de que esos principios o creencias están explícitos en la cultura de la sociedad en la que el sujeto se encuentra. Propone que esta existencia de una concepción del mundo en la cultura de una sociedad no permite averiguar cual es la concepción del mundo realmente activa en esa sociedad.Más adelante nos habla de que las concepciones del mundo suelen presentar unas pautas muy concentradas y conscientes, en forma de credo o de sistema filosófico. Habla de que esta última forma, la filosofía como sistema intentó dictar u repertorio de supuestas verdades superiores a las de toda ciencia. En este caso, la concepción el mundo quiere ser un saber, un conocimiento real del mundo con la misma positividad que el de la ciencia.Esta filosofía sistemática acaba por caducar y a esta caducidad le atribuye a varias acusas: la definitiva y consciente constitución del conocimiento científico durante la Edad Moderna en la que el conocimiento se caracteriza por su capacidad de posibilitar predicciones exactas y porque todas las personas adecuadamente preparadas entienden su formulación del mismo modo, es decir, es intersubjetivo.

Destaca que la anterior concepción del mundo, la filosófica carece de estos rasgos que le tiene el conocimiento positivo, y carece de ellos porque es necesario que sea así, de esta forma trata de entender o plantearse cuestiones no resolubles por los métodos decisorios del conocimiento positivo.

Concepción marxista del mundo:

Se habla de ella como una “concepción materialista y dialéctica del mundo” que está motivada por la aspiración a terminar con la presencia en a conducta humana de factores no reconocidos o idealizados y que consiste ene que no puede considerarse como un sistema de saber superior al positivo.

Esta fórmula marxista considera que no existe conocimiento a parte por encima del positivo y trata de explicitar la motivación de la ciencia misma. A esta intención de llegar a la máxima motivación de la ciencia es llamado inmanentismo. Este inmanentismo se ve en la conducta del científico, que investiga unos fenómenos basándose en otros y no en instancias superiores al mundo.Este principio en el que se basa el marxismo no es el único, existe otro, el de la dialéctica.

Éste se inspira en las limitaciones del hacer científico-positivo, es decir, observa que la ciencia trabaja mediante un método analítico-reductivo, eliminando factores irracionales y reduciendo las formulaciones complejas a factores menos complejos, de forma que penetra eficazmente en la realidad y posibilita la formación de conceptos mas adecuados. Tras esta observación se desprende que los conceptos que la ciencia trata son generales y no tienen en cuenta aspectos concretos sino factores naturales más o menos homogéneos. Quiere decir todo esto que la tarea de una dialéctica materialista consiste en recuperar lo concreto e intentar la comprensión de totalidades concretas.

Publicado por Alberto Martin Muñoz

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